Hasta mi última actualización en enero de 2022, existen diferentes programas y fondos europeos que pueden brindar apoyo financiero para la rehabilitación de viviendas. Sin embargo, ten en cuenta que las políticas y programas pueden cambiar, por lo que es recomendable consultar las fuentes oficiales de la Unión Europea (UE) o contactar con las autoridades locales para obtener información actualizada. Algunos programas y fondos europeos que históricamente han estado vinculados a la rehabilitación de viviendas incluyen:

1. Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (Fondos ESI): Estos fondos, como el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y el Fondo Social Europeo (FSE), han sido utilizados para financiar proyectos de desarrollo regional, incluyendo la rehabilitación de viviendas en áreas urbanas y rurales.
2. Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (NextGenerationEU): Este mecanismo, establecido en respuesta a la pandemia de COVID-19, tiene como objetivo apoyar la recuperación económica y la resiliencia. Algunos de estos fondos pueden destinarse a proyectos relacionados con la vivienda, la eficiencia energética y la rehabilitación.
3. Horizonte Europa: Este programa se centra en la investigación e innovación, y algunos de sus fondos pueden estar disponibles para proyectos innovadores relacionados con la construcción sostenible y la rehabilitación de viviendas.
4. Programa LIFE: Este programa financia proyectos medioambientales y de sostenibilidad, y puede incluir iniciativas relacionadas con la eficiencia energética en el ámbito residencial.
5. Programa Erasmus+: Aunque su enfoque principal es la educación, la formación, la juventud y el deporte, Erasmus+ también puede financiar proyectos relacionados con la vivienda y la comunidad.
6. Banco Europeo de Inversiones (BEI): El BEI proporciona financiamiento para proyectos que contribuyen al desarrollo sostenible y la cohesión económica y social en la UE, incluyendo iniciativas relacionadas con la vivienda.
7. Fondo de Cohesión: Este fondo se centra en los Estados miembros cuyo Producto Interno Bruto (PIB) per cápita es inferior al 90 % de la media de la UE. Puede ser utilizado para financiar proyectos de infraestructura, que podrían incluir la rehabilitación de viviendas.